El Kiwi

Los kiwis son originarios de la China (dinastía Ming 1200aC), pero realmente se han hechos famosos por Nueva Zelanda que son sus mayores productores. El kiwi se llama realmente Actinidia deliciosa, otros la conocen con el nombre de lulo. Es en Nueva Zelanda que la comenzaron a llamar kiwi, por su gran similitud a un ave de igual nombre, que es pequeña, redonda y su plumaje se parece a la vellosidad externa del fruto.

Es la fruta más rica en vitamina C y vitamina E. También nos aporta vitaminas del grupo B, como la B1, B2, B3 y B6. Otra vitamina que destaca es la vitamina K que cumple una función muy importante en la coagulación de la sangre y evita las hemorragias.

Entre los minerales se destacan el potasio, el yodo, el calcio, el fósforo, el hierro y el sodio. Es también rico en cobre, vital para el crecimiento de los niños, fortalece los huesos y hace desarrollar el cerebro y el sistema inmunitario. Tiene más potasio que el plátano y controla la presión sanguínea, controla la actividad del corazón y mantiene el equilibrio de los fluidos.

Rica en luteína un compuesto fitoquímico que reduce el riesgo de cáncer, enfermedades cardíacas, degeneración macular y cataratas. Rica en fibra soluble e insoluble que la hace apta para personas con diabetes. 

Contiene folatos que en conjunto con el calcio, el fósforo y la vitamina C, resulta verdaderamente beneficiosa para la estructura ósea.

Beneficioso para:

• Estrés. 
• Problemas de retención de líquidos (diurético). 
• Problemas de transito intestinal, estreñimiento (gran poder laxante) 
• Hipertensión.  
• Vista. 
• Sube las defensas. 
• Menopausia, embarazo. 
• Resfriados. 
• Refuerza el sistema inmunológico, favorece la formación de glóbulos rojos y blancos. Formación de anticuerpos. 
• Antinflamatorio. 
• Problemas cardiovasculares 
• Facilita la Digestión