Si sois amantes de la cocina natural y os gusta comer verduras de temporada es indispensable saber hacer conservas, ya que muchos platos tradicionales de nuestra cocina que se utilizan ciertos alimentos, no los poseemos todo el año, como es el caso del tomate.
Los envases son muy fáciles de conseguir, en cualquier tienda que vendan productos de bazar los encontrareis a precios muy razonables, se pueden reutilizar varias veces, lo importante es que la goma que se encuentra generalmente en la tapa esté en buen estado, para que esta haga el sellado idóneo. Y otra cosa muy importante es esterilizar los frascos hirviéndolos en abundante agua durante media hora, para evitar cualquier contaminación microbiológica que dañe al alimento.
Una vez tenemos los envases esterilizados los llenamos con alimentos de nuestra preferencia, salsas, tomate fresco (a los cuales les retiramos la piel por el proceso de escaldado, pudiendo utilizar el agua de cocción para su conservación), escabeches, verduras escalibadas, verduras en salmuera (agua saturada a un 30% de sal), pickles (encurtidos), etc.
Una vez llenos los envases con el alimento deseado y bien cerrados, los colocaremos dentro de una olla, podemos poner en el fondo dos hojas de papel cocina o un trapo, para evitar que los envases que hagan daño duran el hervor. Los cubriremos con abundante agua, tiene que quedar bien cubierto y hervir durante media hora, este calor consumirá el aire que hay en el interior del recipiente generando un vacío que conservará el alimento de una temporada a otra. Se almacena en cualquier lugar, como una despensa, no necesitan estar en la nevera excepto una vez abiertos.
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