Gel de Aloe-Vera casera

Es ideal para hidratar la piel y refrescar la piel reseca. Es muy útil para aplicar sobre cortes, heridas, quemaduras y cicatrices. Sierve para todo tipo de piel y su uso se puede ampliar hasta los niños. Sus propiedades refrescantes y cicatrizadoras la convierte en una aliada after sun. 

Ingredientes:
¼ taza de pulpa de aloe-vera
Vitamina C en polvo: 500mg.
2 perlas de aceite de Vitamina E

Elaboración:

Como primer paso debemos cortar las hojas con un cuchillo afilado de manera horizontal, quitando la capa superior de modo que quede expuesta la pulpa de las mismas, repetir el procedimiento con todas las hojas (dependiendo del tamaño de la hoja podremos llegar a necesitar entre una o varias, procurar sacar la más vieja de todas y recortad hojas según la necesidad).

Luego es el momento de recolectar toda la pulpa de las hojas, raspando con una cuchara grande hasta llegar a la piel inferior, de este modo extraemos todo el gel.

Ahora es momento de mezclar los ingredientes, para ello vamos a colocar la pulpa de Aloe Vera dentro de un bol junto con los 500mg de Vitamina C y el aceite de Vitamina E (tanto la vitamina C como la vitamina E actuaran de manera natural a conservar el gel, ambos protegen de la oxidación) , se debe triturar con un turmix hasta lograr una pasta homogénea con un color uniforme.

Una vez lograda la consistencia deseada en la pasta, solo resta guardarla en algún frasco de vidrio o recipiente apto para largas conservas, con uno de mermelada es suficiente. 

Antes de guardar nuestra pasta dentro, es necesario esterilizar el frasco dejándolo en un agua hirviendo como mínimo 15 minutos, luego de esto se debe meter la preparación de aloe vera rápidamente con el frasco aún caliente y luego tapar fuertemente.

Una vez que nuestro frasco este bien cerrado se debe conservar en la heladera, donde obtendrá una consistencia similar a la de un gel. Con esto ya tendremos nuestro gel de Aloe vera listo para utilizar.